El presidente Andrés Manuel López Obrador regresó a encabezar su conferencia mañanera, tras un semana de haber dado positivo a Covid-19. 
Recuperado de su segundo contagio por la pandemia, reapareció en Palacio Nacional. 
Dijo que le fue bien pues la variante Ómicron no es tan grave como la Delta. 
«Ya salimos del contagio, nos fue bien. Es demostrable que esta variante no tiene la misma gravedad que la anterior, que a variante delta en síntomas y también en tiempo de recuperación”, señaló. 
Sin embargo resaltó que Ómicron es muy contagiosa, y reconoció que siguen creciendo los casos. 
«Esto es bueno para que no nos espantemos. De todas formas hay que cuidarnos, evitar contagios, porque eso sí, se trata de una variante muy contagiosa, mucho muy contagiosa. Están creciendo mucho los contagios en el país, pero no así las hospitalizaciones y lo más importante es que no hay incremento en fallecimientos”, reiteró.
Por ello dijo que los mexicanos deben vacunarse y aplicarse el refuerzo. 
«Lo que ayuda mucho es la vacuna, el vacunarnos y no dejar de aplicarnos la vacuna de refuerzo, porque con esa vamos a lo seguro, con la vacuna de refuerzo, son menos los síntomas y no nos agravamos. Agradezco a toda la gente que estuvo pendiente de mi situación de salud, amor con amor se paga es recíproco”, mencionó. 
El lunes pasado el mandatario amaneció ronco y por ello decidió hacerse una prueba de Covid-19, y más tarde informó que dio positivo y que se resguardaría. 
No obstante siguió trabajando a distancia pues sus síntomas fueron leves, sin fiebre y oxigenación estable. 
Solo fueron «dos días ronquera y ardor en la garganta», pero el Vaporub le ayudó mucho, dijo. 
«Mi tratamiento consistió en cuidarme, aislarme, tomar mucha agua. Eso lo recomiendan los médicos, paracetamol dos días nada más cuando tuve malestar, no quise tomarlo más tiempo. Miel para la garganta, aunque estaba caro el limón, procuré no ponerle tanto y remedios que ya todos sabemos. Se burlan del vaporub pero ayuda, sobre todo porque a todos nos gusta que nos acaricien, que nos den una talladita en el pecho, en la espalda, en las plantas de los pies, a los niños, a los adultos a todos», explicó

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