Por: Osvaldo Díaz

A poco menos de dos meses de concluir su mandato como Gobernador de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón realizo un veto más, ahora a la nueva Ley de Educación aprobada hace apenas el pasado 20 de julio.


Con esto, el mandatario estatal estaría aplicando el veto número 73, por arriba de los 22 que realizó Natividad González Parás y los 15 de Rodrigo Medina.


En punto de las 14:10 horas, Homero Cantú, subsecretario de Asuntos Jurídicos del Gobierno del Estado se presentó en la Oficialía de Partes del Poder Legislativo y entregó el documento.


De esta forma, el mandatario estatal cumplió la amenaza difundida hace días y regreso firmado el Decreto 533 con varias observaciones que deberá ser analizadas por los diputados, para determinar si acepta o no el veto y volver a votarlo.


Dentro de las inconformidades que expuso el ejecutivo sobresale como principal causa el impacto económico que el nuevo ordenamiento ocasionaría en las finanzas estatales y que no se consideró por parte de los legisladores locales.


Esto debido a que la ley establece que el Ejecutivo debe de contemplar de manera progresiva, y de acuerdo con la disponibilidad presupuestaria, los recursos necesarios para garantizar la prestación de la educación inicial, con el fin de lograr su universalidad.


Ante tal situación, desde el 21 de julio, el Tesorero del Estado, Carlos Garza, había advertido del eventual veto a la Ley, entre otras causas, por incumplirse con lo dispuesto en la Ley de Disciplina Financiera al no contar con un estudio de impacto económico.

“Se está devolviendo el decreto principalmente por el impacto presupuestal que tiene en diversos rubros contemplados como en la educación inicial, por el tema de que se otorgan estímulos a las asociaciones civiles de los maestros que se dediquen a la enseñanza, por la adquisición de un seguro escolar contra accidentes para los alumnos y así muchas situaciones, como la creación de plazas adicionales en donde se invaden facultades de la Secretaria de Educación federal”, expresó Cantú.

Sin embargo, el coordinador del PAN en el Congreso local, Carlos de la Fuente, afirmó que no existe un argumento sólido para que el Estado vete la nueva Ley de Educación.

“Vemos muy lamentable el tema del veto en la Educación, siempre estuvimos en contacto con la Secretaría de Educación, siempre estuvimos en contacto con la Tesorería del Estado”.

“Dice claramente en uno de los transitorio que esta ley se tendrá que ir implementando en base a la capacidad presupuestario que tenga el gobierno del estado y ese cuarto transitorio fue una recomendación de la Tesorería del Estado así que nos vemos con claridad el motivo del por qué se estaría vetando. Nosotros nos vemos argumentos sólidos”, alegó.

El veto de más leyes aprobadas en el último periodo extraordinario no está descartado, toda vez que, el Gobierno del Estado se encuentra estudiando todos los decretos y lo definirían en su momento.

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