PuntoU.- Con una marca avalada por la Federación Mexicana de Asociaciones de Atletismo, el lanzador de martillo Diego del Real Galindo aseguró su participación en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021.

Del Real Galindo se reunirá con su equipo de trabajo para llegar en forma plena a los Juegos Olímpicos de Tokio 2021, buscando seguir haciendo historia en el deporte mexicano.

El atleta regiomontano, en su tercer intento, batió su propio récord de 77.49 metros impuesto en el 2016 luego de conseguir un lanzamiento de 78.68 metros, 1.18 metros más de lo que solicitaba la Federación como marca mínima para participar en los Juegos Olímpicos.

“El objetivo de este evento fue buscar la marca, quitarnos la presión del tiempo. Fue difícil, pero ya se tiene y ahora el enfoque es total en los Juegos Olímpicos, tener el nivel competitivo internacional para estar en Tokio en la mejor forma”, declaró Del Real Galindo.

Presencia de la UANL en Tokio

El lanzador se mostró agradecido con la Asociación Estatal de Atletismo, que dirige el maestro Luciano Ramírez, ya que el control técnico de atletismo, realizado en la pista del Centro de Alto Rendimiento de Nuevo León, reunió lo necesario para que todos los atletas buscaran su pase a los Juegos Olímpicos avalados por la Federación.

Antes del lanzamiento tenía un mar de pensamientos, pero me senté y dije: ‘ya estoy aquí, es ahora o nunca, no quiero terminar la competencia diciendo que pude haber hecho algo más y di todo bien encaminado”.

Diego del Real Galindo

Lanzador de martillo

Del Real Galindo se une a la lista de los universitarios ya clasificados para la justa deportiva más importante a nivel mundial: Daniel Corral, en gimnasia; Kenia Lechuga, en remo; José Luis Sánchez, en tiro deportivo, y Mario Santana Ramos, en lanzamiento de clava.

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Tras el podio olímpico

Diego del Real Galindo es egresado de la Facultad de Contaduría Pública y Administración y múltiple campeón nacional representando a Nuevo León y a la UANL en la Universiada Nacional y ahora, su siguiente objetivo, en la que será su segunda participación en una Olimpiada, es el podio olímpico, aunque esto no lo obsesiona ya que sabe que en cada evento ha dado lo mejor de sí.

“He aprendido mucho desde el ciclo olímpico anterior. Me enfrenté al mantenerme, ya que las exigencias son otras, el nivel de precisión de detalle es otro. No todos están preparados para esa presión que implica dar una marca y mi entrenador comparte conmigo esta situación, al igual que mi psicólogo, metodólogos, es un equipo que trabajó mucho para este momento”.

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