Damnificados en Guerrero bloquean carreteras y exigen apoyo urgente tras el paso del huracán John
CIUDAD DE MÉXICO (apro).- Residentes de la Costa Chica de Guerrero, afectados por el huracán John, bloquearon carreteras federales en demanda de ser incluidos en los censos de la Secretaría del Bienestar para recibir apoyo en la reconstrucción de sus viviendas dañadas.
Desde el paso del huracán el 23 de septiembre, los bloqueos han sido recurrentes, pero en los últimos días se intensificaron tras impedir el paso de cualquier vehículo, incluso de servicios de emergencia.
El huracán John, de categoría 3, impactó Marquelia y provocó fuertes lluvias del 22 al 27 de septiembre, causando serios daños en 76 mil 149 viviendas de 72 municipios en Guerrero. Las autoridades reportan que 236 mil 636 personas fueron afectadas y que el huracán dejó un saldo de 29 muertos.
A más de un mes de la tragedia, habitantes de municipios como San Marcos, Las Vigas, Florencio Villarreal, Cuautepec, Copala, Marquelia, Juchitán, Azoyú e Igualapa han mantenido bloqueos para presionar a las autoridades.
Durante las manifestaciones, los damnificados señalaron que muchas viviendas no fueron incluidas en el censo, especialmente aquellas con techos de teja que sufrieron daños por filtraciones. «Fuimos discriminados por los del censo. Les mostré todo el daño que causó el agua en mi casa, y prometieron volver, pero nunca lo hicieron», expresó una manifestante en Agua Zarca, Juchitán.
Estos bloqueos han generado largas filas de automóviles y han derivado en tensiones entre manifestantes y conductores, quienes deben pagar 50 pesos para poder continuar su camino. En un video difundido en redes sociales, se observa cómo un conductor de ambulancia fue retenido y obligado a pagar, mientras los manifestantes golpeaban su vehículo.
En Tixtla, otro grupo de afectados bloqueó la carretera federal Chilpancingo-Tlapa el 5 de noviembre. Camilo Dircio Juárez, representante del barrio del Santuario, explicó que, además del desbordamiento de la laguna que provocó las inundaciones, las condiciones de salud en la zona empeoró con casos de dengue, enfermedades cutáneas y problemas gastrointestinales.
Las autoridades locales propusieron mesas de diálogo para llegar a acuerdos, pero los bloqueos continúan. Los damnificados aseguran que no liberarán las vías hasta recibir una respuesta concreta a sus demandas.